Bienal 2008
- Whitney Museum of American Art -
La Bienal 2008 del Whitney Museum of American Art, que se inauguró el 6 de marzo en Nueva York, y se extenderá hasta
el 28 de mayo, ha sido organizada por sus curadoras -Henriette Huldisch y Shamim M. Momim- para “tomarle el pulso” al estado del arte que hoy se hace en Estados Unidos, encontrando un paisaje en el que cabe "casi de todo”.
Han organizado la muestra para que los visitantes no tengan que seguir ningún orden establecido, sino que podrán empezar a recorrerla por cualquier habitación, de cualquier piso, de cualquier edificio.
Robert Betchle y John Baldessari, ambos de 76 años, representan a la generación más veterana de artistas estadounidenses actuales. Pese a la juventud de las curadoras, que no llegan a los 35 años, la Biennal ha
tratado de mostrar obra de todas las generaciones.
Envejecer no significa perder el espíritu innovador.
Daniel Joseph Martínez, de 51 años, ofrece una de las obras más provocadoras políticamente de la muestra: la instalación, Divina violencia, una sala llena de lápidas amarillas en cuyas inscripciones se puede leer desde el nombre del grupo terrorista ETA al de la organización judía Jewish Defense League pasando por los servicios secretos del KGB, la CIA o
el Mossad.
Dentro de este selecto cajón de sastre caben desde la polémica película de Spike Lee sobre el efecto del huracán Katrina en Nueva Orleans a la exquisita reinterpretación del objet trouvé de Carol Bove, las performances de la artista de glam-punk Kembra Pfahler (líder de The Voluptuous Horror of Karen Black) o los collages sobre plexiglás de Rita Ackerman.
Los artistas del siglo XXI, educados en este mundo de redes sociales virtuales y múltiples, se muestran en esta bienal preocupados con la necesidad de expresarse a diferentes niveles.
Ellen Harvey, artista nacida en Inglaterra en 1967 y afincada en Nueva York. muestra también sus dibujos en la Bienal realizará 100 retratos a lápiz de visitantes de la exposición; dedicará no más de 15 minutos a cada retrato, luego entregará un cuestionario a quien ofició de modelo para éste critique la obra y después le regalará su dibujo. Dice: "Ser artista es intentar hacer cosas extraordinarias y fracasar siempre". "Me interesa el fracaso. Ser artista es intentar hacer cosas extraordinarias y fracasar siempre. No nos engañemos. Estos retratos están hechos en 15 minutos. Así que la mayoría serán bastante malos", explica en un receso entre retrato y retrato.
Matthew Brannon, a cuyas creaciones en papel el Museo Whitney le dedica toda una sala, trabajará en el Armory sobre un guión sonoro titulado The last page in a very long novel que realizará con los sonidos que grabe cada noche en el edificio. Al final, enterrará su obra.
Bert Rodríguez ha construido una sala titulada La habitación del coronel. Ofrece «terapia psicológica» gratuita en sesiones grabadas que después son emitidas como murmullos en el espacio.
Fuente:Diario El País- España.
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