Paola Eliana Volk
"En relación a la escritura he producido a lo largo de la vida y esporádicamente cuentos breves catárticos y reflexiones. Durante unos meses de viaje por Asia la necesidad de escribir surgió frecuente, poderosa, y en forma de poesía por primera vez. Así como la necesidad de compartir y discutir sobre los textos o tópicos abordados en ellos."
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En un momento de distracción,
dejé escapar esa sustancia extraña,
casi incorpórea que se sentó a mi lado mirando la nada,
tal y como yo estaba.
¿Que es esto? Pensé que había pensado,
pero usando mis palabras como puente se acerco hasta casi tocar mis labios,
como quien se tienta a entrar por donde ha salido.
Soy el aire de tus castillos celestes,
¿No reconoces la brisa de tus ilusiones que todavía flotan como plumas sobre este aire caliente?
Leyendo la pregunta en un destello de perplejidad,
que no llegaron a abrazar lo suficientemente fuerte mis pestañas, me respondió:
Solo quiero un beso,
para recordar que alguna vez fui un cálido suspiro,
dulcemente abrigado en la abstracción absoluta,
antes de fundirme de forma rotunda,
en la negrura inquieta y espesa de la sombra de tus dudas.
Hilos trenzados de blancos sentimientos,
jamas tamizados por pensamiento alguno,
flotan livianos sobre grises sombras de infladas dudas,
redondas, pesadas, rotundas,
colgadas de rosadas y pomposas ilusiones,
ligeras y aéreas como risas infantiles,
se expanden en apasionados destellos,
ignorantes de su plomizo lastre.
La noche viste al mar de gala,
con una larga cola de espuma fosforescente
y en su pecho luciérnagas marinas,
de mágico azul,
sorprenden al fuego de tímidas velas,
que desvelan encendidas miradas.
Ensueño que el amanecer regresa a su bruma,
con música de selva creciendo bajo la lluvia.
Agua fresca,
que el aliento caliente de la tierra,
devuelve al cielo,
en un violento estallido de colores,
que rasga la gasa de su gris tormenta.
Desnúdame.
Sácame las joyas de a una.
borra el rouge y las mascaras,
hasta que mi piel quede desnuda,
como madre perla recién descubierta.
Con los ojos abiertos,
quiero disfrutar como me quitas las medias.
Que vuelen los zapatos,
alados como los de Hermes
me trajeron abriéndome camino
a las orillas de tu Eros.
Que se lleven consigo
la ropa interior antes que el vestido,
para que dibujes su ausencia
con boca de sombras hambrienta.
Déjame pelear por el vestido.
Déjame resistir.
Mientras crece como marea
irrefrenable de luna llena,
un ahogado gemido que ruega:
Desnúdame.
Desvestirse del miedo o vestirlo con orgullo (beneficio 2rio del miedo rey)
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Glorificar la dificultad para ornamentar al feo miedo,
que nos viste de miserables y sucios harapos.
Cerrar los ojos en la sombra,
desdibujar la linea del ser en su seno.
Condimentar en exceso de impenetrable su negrura
y hervir pasadas horas hasta desteñir los colores de la mas vibrante evidencia.
Alimentarse de yertas cenizas.
Para que parezca una hazaña saciar,
la natural e involuntaria necesidad de respirar.
Para olvidar que donde no hay sol hay fuego.
Y que nuestras manos no solo piensan,
sino que hacen lo que sienten.
Hay algo casi increíble de maravilloso,
en la dimensión espacial de la mente y su capacidad expansiva.
Puede albergar tanto cuanto nosotros y otros nosotros imaginen,
puede iluminar y ensombrecer,
el tiempo tiene peso pero no métrica,
todo señala la existencia.
Pero sin dudas,
lo que más me maravilla,
es su fecunda capacidad regenerativa.
De la devastación sin huellas,
de entre las sombras blancas de la nada,
de los muñones emocionales surge,
tímida o impetuosa,
una nueva forma siempre,
con o sin permiso de nuestra voluntad,
en la fisura de la mínima distracción,
el cambio se manifiesta.
Ramilletes de caminos anudados en solitarios llantos de almohadas mordidas en oscuras noches lastimadas por ásperas luces urbanas.
Vuelos que terminan en manos cerradas tocando la puerta en direcciones equivocadas.
Puertas, puertas y mas puertas de incontables mirillas y ninguna bisagra.
Relaciones enfrascadas con prolijas etiquetas esperando en la vereda a ser recolectadas y en la anónima pila de basura depositadas y olvidadas.
Beautiful! I said, and I broke every classical greek statue with my words.
I built your body with my eyes, and all the european silent halls fell down.
Go away! I demanded, otherwise all the creations will end.
I will cry stone without you by my side, but I will recreate a better myself.
Hermoso! dije, y rompí cada estatua griega clásica con mis palabras.
Construí tu cuerpo con mis ojos, y todas las salas del silencio de los palacios europeos cayeron.
Vete! demandé, o de otra manera la creación entera terminará.
Voy a llorar piedra sin ti a mi lado, pero voy a recrear un mejor yo.
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