Antropología
El Camino del Payaso Sagrado |
Peggy Andrea |
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Para los indígenas americanos, el camino del Payaso Sagrado es también considerado un llamado espiritual, esencial para el correcto funcionamiento de la tribu:
"En días anteriores que los invasores llegasen, tuvimos payasos. No payasos como los de ahora, con narices rojas redondas y trajes embolsados. Nuestros payasos llevaron puestas toda clase de cosas.
Ellos se pusieron todo aquello que sentían que debían usar. Y no salían solamente de vez en cuando para comportarse como tontos y hacer reír a las personas, nuestros payasos estaban con nosotros todo el tiempo, eran tan importantes para el pueblo como lo eran el jefe, el chamán, los bailarines, o los poetas."
La mayoría de las tribus tenía sus Payasos. Los Oglala y Lakota les llamaron Heyoka ("loco"), los Arapaho les llamaron Ha Hawkan ("el santo idiota"), y ambos pueblos les consideraban cualidades religiosas. Los Salish honran la memoria de un Payaso que (no hace tanto tiempo) desafió a un misionero. El misionero seducía a las personas regalándoles pequeños espejos para atraerlos a su iglesia mientras le instában a cubrir sus cuerpos con las ropas de las personas blancas. ¡Se dice que el Payaso un domingo entró en la iglesia llevando puesto nada más que un sombrero y zapatos viejos!
Escultura de payasos sagrados del Pueblo Hopi - Roxanne Swentzell
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Los Hopis protegieron a sus Payasos Sagrados incorporándoles en sus ceremonias Katchina ("el Espíritu de la nube") donde los Payasos hacen una divertidísima entrada desde un techo y bajan por una escalera de cuerdas a la plaza donde los Katchinas danzan. "¡Mira allá abajo!" - ellos exclaman- "Todo es abundante y bello"! Su descenso es muy peligroso, usualmente cabeza abajo, y causa mucha risa cuando ellos comienzan a tropezar unos con otros y caen en el último tramo. ¡No ven a los Katchinas hasta que se encuentran inesperadamente con ellos, y entonces dicen "Este es mío!. o Todo esto es mío!" Se comportan de manera tonta, infantil, ambiciosa, egoísta, y lasciva ¡Al fingir caer en la cuenta de su ambiente, se burlan de los turistas, los antropólogos, los indígenas vecinos, aun de sí mismos! Mendigan comida. Sus juegos de adivinanzas y sus números de equilibrismo complacen a la gente. Los Payasos bailarines algunas veces fingen de que son invisibles, realzando así la bufonada.
La supervivencia de estos payasos rituales nos da una pista de lo importante que era el Payaso para el espíritu de comunidad de cada tribu. Sin embargo, nada era sagrado para un Payaso Sagrado. Él era un factor de suprema importancia para la crítica social. Su mímica chistosa y su chacoteo denunciaba hipocresía y arrogancia. Sus representaciones de ridículo comportamiento mostraron a la gente (de manera humorística) su propia estupidez y puntos ciegos. "Un Payaso era como un periódico, o una revista, o una de esas personas que escriben un artículo para decirte si un libro o una película son buenos. Ellos hacían comentarios sobre todo, constantemente. Si un payaso pensaba que lo que el concejo tribal se preparaba a hacer era estúpido, entonces simplemente aparecía en el concejo e imitaba cada ademán que cada uno de los líderes hicieran. Sólo el payaso les imitaría de modo tal que cada pequeña verruga en esa persona quedara expuesta, cada hueco en sus conceptos repentinamente cobraba importancia".
Con la llegada de los "invasores", este ente sagrado llegó a ser uno de los más peligrosos — tal vez más peligroso que el del Guerrero. ¡Quizá este sea el motivo por el cual la mayoría de los Payasos Sagrados han desaparecido!
El cuento, "El Vuelo de la Séptima Luna" dice:"No es extraño de que nunca nos hayamos llevado bien mi gente y tu gente. Estaban poniéndose furiosos todo el tiempo unos con otros y el odio aumentó mucho entre nosotros. Fue inevitable, porque mi gente tenía gran orgullo y humor. Los tuyos se ponían muy nerviosos y querían dispararle a aquellos que se reían de ellos. Pero todavía encuentro que las personas blancas son muy divertidas. Tengo que reírme de ti porque tú nunca te relajas. Cada palabra para ti es una certeza o, si no, algo completamente lejano. A ti te gusta apalear el significado de algo para adaptar tu estupidez. Te sería de provecho dejar de ser tan frágil ".
El Payaso Sagrado del pueblo Salish mencionado más arriba hizo un viaje a Hudson Bay, Victoria, para hacer payasadas por el hecho de que esa gente intercambiaba pieles de foca y de nutria por ron. La compañía de hombres blancos pronto tuvo demasiado de todo esto, y cuando más tarde aquel payaso fue enontrado con un balazo en la cabeza, todos se imaginaron que un hombre blanco lo había hecho. Los indígenas mismos prohibieron estrictamente emplear cualquier tipo de violencia con un Payaso Sagrado.
Estos Payasos eran peligrosos para los tiranos y los explotadores porque eran tan caóticos y completamente sinceros. Podrían ver con los ojos de un niño, y por esto, podrían divisar a un farsante a una milla de distancia. Fueron algunas veces llamados "destructores de héroes". Los invasores blancos los odiaban, claro está, y buscaban alguna manera de ocultarlos, así fuera matándolos. Aquellos que fueron muertos son recordados con mucho respeto por su gente. Aquellos que sobrevivieron lo hicieron aprendiendo a hacerse embaucadores, cambiar su forma, y volverse invisibles si fuera necesario.
Una figura religiosa negativa (tal como el Payaso Sagrado) parece algo extraño fueras de los criterios tribales. La mayoría de los Indígenas Americanos, sin embargo, aman su humor y cuentan historias acerca de un mítico Embustero cuyas bromas y desventuras enseñan las moralejas de la tribu. El Embustero toma muchas formas, pero las favoritas parecen ser animales que son excepcionalmente curiosos, ingeniosos y adaptables — sobrevivientes, como la araña, el conejo, el búho, el murciélago, el coyote y el cuervo. Las historias están llenas de situaciones chistosas de la travesuras del Bribón, siendo puesto en ridículo más de una vez, y hasta enredándose en asuntos obscenos. "Al Embaucador le gusta hacer payasadas y contar chistes verdes". Quizá la importancia que el indionativo americano le ha dado al Embaucador se deba a su habilidad a sobrevivir contra todo pronóstico. El Embaucador comete una buena cantidad de errores, y usualmente le da mucho trabajo aprender de ellos. Sin embargo, sigue adelante. Él no se hunde en desesperación, no se suicida por frustración. Sobrevive.
El embaucador nos muestra cómo nos engañamos nosotros mismos. ¡Su curiosidad incontrolada le acarrea consecuencias, pero, entonces, algo nuevo es descubierto (sin embargo a menudo no es lo que él esperaba)! ¡Aquí es donde la creatividad se origina— experimenta, haz algo diferente, a lo mejor hasta algo prohibido, y voila! ¡Un gran adelanto ocurre! ja! ja! ¡ Somos libres! ¡El mundo es creado otra vez! Haz algo al revés, viola tus tradiciones, rompe barreras; destruye el mundo que tú conoces, deja entrar lo nuevo.
Los payasos sagrados funcionan como los ojos del Embaucador en este mundo: Espejos en los cuales vemos nuestra insensatez así como también nuestra resistencia. Como dijo el payaso Salish a las personas que fueron seducidos por la iglesia del misionero de los brillantes y bonitos espejos, "hay mejores espejos — los espejos en los ojos de las personas que tú amas". Nootros nos reflejamos los unos a los otros. ¡Cuando nosotros mismos comenzamos a tomarnos demasiado seriamente, allí está el Payaso para otorgarnos una risa! ¡Cuando nos volvemos demasiados pesados con la soberbia, allí está el Payaso para derrumbar algunas de esas cargas y alegrarnos! El poder del Payaso es el poder de la misma. Admite el dolor, entonces déjalo ir. No lo lleves de acá para allá contigo. Enfoca la atención en la alegría, el misterio, la felicidad, la broma cósmica. Cuando los Payasos se deleitan en comer y en las payasadas sexuales, muestran este amor por la vida.
Payaso kachina Hopi- Escultura de Richard Gorman
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Es algo más difícil detectar a un joven payaso que detectar a un joven guerrero. Aquellos que describen un niño como "demasiado sensitivo" necesitan ser conscientes de que el pequeño puede ser un Payaso Sagrado en formación. El niño puede ser tímido, o puede ser un fanfarrón temperamental, algunas veces las dos cosas en situaciones diferentes. En todo caso, un joven payaso es un explorador en el mundo de las emociones. Seguramente prueba los límites de sus sentimientos como el joven guerrero prueba los límites de su voluntad. Puede entretenerse a sí mismo jugando por horas juegos ficticios, ejercitando su imaginación fantástica. A menudo imitará a animales en su juego. También acostumbra a tener un buen oído para la música y gran talento para el drama. Físicamente, tendrá un sentido excelente del equilibrio.
La iniciación de un Payaso Sagrado ocurre cuando él se da cuenta de que aún las personas que se quieren pueden ser crueles entre sí, o que la Vida misma puede ser cruel. Su intensa reacción hacia una experiencia personal de abandono, traición, o una frustración amorosa puede dar como resultado una depresión extrema, desequilibrio emocional, una crisis nerviosa, o (en el peor de los casos) un intento de suicidio. Una Heyoka recuerda su iniciación así, "no me preocupaba por mi vida o lo que a mi me sucediera. No me daba cuenta de ello, pero existe una gran curación en tal abandono". Si en cierta forma pudiera encontrar su equilibrio emocional, en cierta forma experimentaría el dolor y saldría al otro lado, aprendería a bailar al filo de su Alma, la experiencia se convertiría entonces en un portal de acceso a través de las ilusiones de la vida y dentro de la verdad de la vida.
¿Qué es verdad? Esta pregunta impulsa al Payaso a la dimensión sagrada. La Verdad que el Payaso intuye es la interconección de toda vida. Sabe (aunque no puede probarlo) que ninguna parte es más importante que las demás — no importa cuán grande o pequeña sea — y que el cambio más diminuto en una parte produce un cambio profundo en el todo. Ve (aunque no puede explicarlo) que el desequilibrio u obstrucción de la Fuerza Vital es el resultado de personas o grupos creyéndose más importantes que otra. ¡Y no puede evitar pinchar ese exceso de soberbia con su afilado humor!
Un Payaso se vuelve Sagrado abriéndose. Como un niño, es vulnerable, elocuente, y abierto a la Fuerza Vital. A diferencia de un niño, sin embargo, ha aprendido a escudarse y moverse con seguridad a través de un mundo demente usando máscaras, disfraces, trucos y transformaciones. En un mundo cuerdo, podría arriesgar exponerse un poco más.
Los indígenas americanos dicen que los Payasos Sagrados aman a los niños, sanándoles y protegiéndoles. Además, uno de sus poderes es brindar fertilidad a situaciones y personas estériles. Si el Guerrero Sagrado personifica el astro rey, el Payaso Sagrado personifica al Vacío — esa gran abertura malévola del espacio, el gran útero del cual todos nacemos. En la ceremonia Hopi Katchina, se dice que hace mucho tiempo el astro rey recibió la responsabilidad de hacer poblar la tierra, pero que " fracasó en elevarse a sí mismo," prefiriendo más bien seguir sus deseos y ambiciones personales sin hacer caso de la tribu. Por esta razón, la responsabilidad para llevar a cabo el plan de la vida fue tramsferida a los Payasos. En la ceremonia Hopi, los Payasos no aparecen hasta después del mediodía, hasta que "el sol alcance su cenit y comience su viaje cuesta abajo". "Antes aquí estuvo el astro rey, quien fue joven una vez y es ahora un abuelo de muchos poderes. Pero el Sol un día entrará en la nada. Ese es el poder de el Heyoka — la nada".
El poder de la nada es el poder del útero en todos nosotros, el poder de la creatividad verdadera. El poder de estar abierto es algunas veces considerado como una debilidad, pero el Payaso Sagrado nos proporciona esta paradoja: Lo más débil puede ser lo más poderoso. Lo más estúpido puede ser lo más sabio. "En la locura de un payaso, él puede ser obsceno o puede examinar cualquiera de las ideas y estructuras existentes para ver si son verdaderas y auténticas — y se sale con la suya. Él mismo es débil, pero en su mismísima debilidad radica su poder ".
En tiempos modernos, los Payasos algunas veces emergen a la luz pública como comediantes, actores de teatro guerrilla (actuaciones con intención de llamar la atención sobre un asunto político/social a través de la sátira , la protesta y las técnicas carnavalescas), críticos, ritualistas/artistas/músicos que rompen las barreras del "buen gusto" y la estética. Pero usualmente, se limitan normalidad aparente, personas comunes y corrientes que saben cómo obligar a otras personas a reírse de ellos mismos.
¡Si decides emprender este camino, recuerda, sin embargo, mirar detrás de ti (o delante de ti) de vez en cuando. Podría pasar que otro Payaso Sagrado haga el payaso de tí! ¡Y eso podría ser digno de una buena carcajada!
Fuente:
www.zonadecaos.com/Articulos_2008/PayasoSagrado.htm
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