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Revista de Artes
Edición nº 13

marzo / abril 2009
Buenos Aires
- Argentina


 

 

MÁS ALLÁ DEL DISEÑO...

JARDINES DE LA VILLA IMPERIAL DE KATSURA, KYOTO

LOS PASOS DE  PIEDRA

En los jardines de la Villa Imperial de Katsura en Kyoto hay un sendero de losas que ha sido recorrido por emperadores, filósofos, monjes sabios y poetas. A cada losa le corresponde un paso y a cada paso le corresponde un cambio en el punto de vista para considerar una cuestión. Componen ese sendero mil setecientas dieciséis piedras a las que les corresponden mil setecientos dieciséis puntos de vista.

Los jardines japoneses fueron creados desde el período comprendido entre el año 250 y el  600 cuando floreció el shintoismo. Poseen  todos los elementos que conforman el espacio sagrado japonés. Entre los años 559-646, tuvo dos influencias que provinieron de China, alcanzando su máximo esplendor en el período 1333-1573, durante la influencia filosófica-estética del budismo zen.

En el espacio sagrado de los santuarios shintoístas se presentan los elementos primarios de los jardines japoneses, entre los que se encuentra el espacio llamado Kodenchi, donde se reconstruye el santuario cada veinte años y está cubierto de piedra grava blanca. Las rocas llamadas iwakura son otros elementos importantes en los jardines japoneses, así como el árbol que se encuenta en el espacio sagrado de Ise, el santuario se encuentra rodeado de árboles de hinoki y cipreses que conforman un bosque sagrado. El árbol es el alan vital, es el símbolo de la sabiduría del cielo. En Japón, la imagen del árbol aparece como escenario de la vida en el teatro Noh, dentro de la casa vernácula aparece como daikoku hashira y más tarde en el chashitsu o cuarto para la ceremonia de té, en donde la figura del árbol aparece en el tokonobashira.
Durante el siglo V llega de la India un texto hindú, donde describe la Tierra Santa o Paraíso de Occidente de Buda Amida. La descripción figurativa en el jardín de Byôdoin, tiene una imagen de Buda del lado oriente del jardín en dirección al paraíso.
Aunque los jardines japoneses recibieron la influencia filosófica del budismo Mahayana, que se convierte en el budismo Zen, Japón no recibe la influencia en el diseño de los jardines islámicos que son simétricos como el jardín del mausoleo del Taj Mahal y el diseño rectilíneo de los jardines de Kashmir, el Shalamar.
Características de los jardines japoneses
La  asimetría caracteriza los jardines japoneses y los diferencia de los europeos como el jardín Versalles, donde sus visitantes pueden ver claramente los ejes, existe progresión, pero el foco y el fin del eje es siempre una misma vista. En los jardines japoneses, no existe la rigurosidad de la estructura geométrica. Hay una clara intencionalidad que busca la naturalidad:  espejos de agua, caminos de piedra y árboles y jardines secos formados por arena y rocas, casi ausentes de vegetación.
Al estar diseñados en forma natural, permiten observar los cambios de las estaciones. La integración del espacio interior y exterior está íntimamente ligada con la arquitectura, de modo  que está prevista la contemplación de los jardines, ubicando un elemento integrador: el veranda o engawa como espacio de transición.
En los jardines fue muy usado el shakkei o escenario prestado, ampliamente difundido en el período Edo, en el que por ejemplo diseñar una cerca de escasa altura, permitía observar el paisaje aledaño. La ubicación de los pasos de piedra o do-ishi, obligan a volver la vista hacia abajo y hacen que el observador dirija la mirada a diferentes escenarios en el trayecto.

La técnica del crecimiento de un jardín a lo largo de un eje diagonal, no se usó de manera frecuente más que en el período Edo. En la Villa Katsura la estética de la diagonal se puede ver en la forma en que están alineadas las edificaciones que forman los complejos. El diseño de estos espacios, estuvo regido por una serie de canones y reglas de orientación que se encuentran recopilados en un libro llamado "Shakuteki" (1227); el primer libro sobre la jardinería en Japón.

Katsura Rikyu

Katsura, villa imperial, fue la creación del príncipe Toshihito (1579-1629), hermano del emperador Goyozei (1571-1617). Es una de las tres villas todavía existentes en Kyoto y que permanece como uno de los grandes ejemplos del arte de los jardines. La villa y los jardines fueron construidos en el período 1619-1680, agregando adecuaciones y refinamientos en los pisos. Dentro, la elegancia perfecciona cada detalle; maderas exóticas que crean cerraduras y pinturas en las mamparas fusuma, reconocidas como las más finas artesanías en Japón. A la villa principal, se le agregan varios pabellones de ceremonia de té y extensos jardines alrededor de un estanque. La distribución del jardín, la composición de las rocas y plantas, así como otros elementos son un tesoro por si mismos.
Katsura tiene el primer jardín de paseo y se convierte en un modelo ideal para los jardines subsiguientes y como su nombre lo indica, fueron jardines para caminar siguiendo un recorrido circular. El sendero principal de grava o pasos de piedra generalmente, sirve como una ruta de circulación principal y a lo largo de este sendero los elementos están ubicados y abiertos al espectador.



Muchas imágenes literarias fueron incorporadas dentro de los jardines de paseo. Una escena puede ser nombrada por un famoso lugar de Japón o pudo relatar las visitas de la literatura clásica del período Heian, trayendo a la mente conocidos pasajes y anécdotas de los ilustres visitantes. El príncipe Toshihito; era un ardiente admirador del cuento del Genji, del siglo XI y la novela fue inspirada en muchas de las vistas y está plasmada en el diseño de Katsura.
Como el sendero se mueve a través del espacio, revela constantemente los cambios visuales relacionados con los rústicos pabellones de té, las plantas y las vistas del lago. Los edificios aparecen y desaparecen, hasta que al final del sendero se llega al edificio principal. A menudo las vistas emplean una forzada perspectiva, que llegan a dar una sensación de profundidad. Al no ser planeada simétricamente, la villa presenta un constante cambio de escenario cuando es vista por la ruta del jardín, y desde dentro, varias puertas corredizas que dan al jardín, permiten ver una gran variedad de combinaciones, de acuerdo a los deseos personales del momento.



El jardín de Villa Katsura es atribuido al Arq. Kobori Erishu (1579-1647), cuyo estilo fue adaptado a principios del período Edo como una dominante fuerza estética de la nobleza. El príncipe Toshihito y su hijo fueron ilustrados en las artes y dirigieron el diseño de Katsura con la ayuda de expertos artesanos y jardineros profesionales como los hermanos Enshu.
Es notable la sutil habilidad para ubicar los pasos de piedra usados para dirigir los movimientos y las vistas del paisaje. Ciertos senderos fueron diseñados para ser caminados en kimono (vestimenta angosta que sólo permite dar pasos cortos)  y geta (zuecos japoneses) sin dificultad.
La planificación del camino también incorpora el uso del shi-gyô-so (formal, semiformal, informal), un principio de diseño utilizado en las artes de Japón que deriva de la práctica de la caligrafía. Muchos estilos y yuxtaposiciones de piedras son combinados con el uso de plantas escondidas tapando edificios y partes del jardín. A lo largo del sendero aparecen y desaparecen elementos de la vista que incitan finalmente la mirada a los edificios Shoin.
La concepción estética, el cuidadoso diseño y el inmaculado trabajo artesanal y detallada resolución hace de Katsura un lugar excepcional.

Fuentes:
www.animejanai.cl

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Revista de Artes - Nº 13 - Marzo / Abril 2009
Buenos Aires - Argentina
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